Cuando a principios de enero Florencia celebraba la 97 edición de Pitti Uomo, nos quedaron claras dos cosas: que el arte del layering continuaría creciendo exponencialmente y que el punto sería una prenda clave para el otoño-invierno 2020-21.
La versatilidad del punto es innegable. Aunque protegernos del frío sea su principal función y la necesidad que dio lugar a su origen, el concepto del punto ha pasado a ocupar un puesto relevante en términos de moda y el uso de jerséis, cardigans y chalecos habla no solo de funcionalidad sino también de estética.
Inglaterra, como para muchas otras prendas esenciales del armario masculino, vuelve a ser la cuna de un producto que no deja de reinventarse. Allí se produce una de las mejores lanas merinas del mundo y allí comenzaron a tejerse los primeros modelos para que pescadores y campesinos pudieran soportar las temperaturas del duro invierno y la humedad del mar.
Y una vez más, el salto de las clases más humildes a la burguesía. De la utilidad, a la tendencia. La lana y el punto de algodón para verano, pasaron de ser materiales «pobres» destinados a la fabricación de prendas «escondidas» como las medias o las camisetas interiores, a uno de los tejidos más valorados en la industria textil.
La afición de las clases altas por deportes como el golf, el polo o incluso el tenis en la década de los años 20, supuso un cambio de rol. La comodidad y libertad de movimiento que las prendas de punto ofrecían las convirtieron en imprescindibles dentro de los códigos de estilo más sport. El interés de grandes diseñadores como Coco Chanel, hicieron el resto para que su popularidad se transformara en un icono de moda.
En PuroEGO esta no es la primera temporada que apostamos por el jersey como el mejor sustituto de la camisa a la hora de acompañar un look elegante. Ya sea combinado con un traje o como una de las prendas destacadas dentro de un conjunto más desenfadado, el punto es capaz de imprimir un sello de personalidad claramente diferenciador.
EN CLAVE SMART CASUAL
EN CLAVE PREPPY
Y EN CLAVE SOFISTICADA
¿CON CUÁL TE QUEDAS?